Norma de cortesía, contestar a quen che envía unha carta. Velaquí a resposta dalgún dos profesores ao que lle chegou a carta.
(Hai moita máis información en: Soy pública)
Sra. Presidenta:
Es cierto que dentro de pocos días comenzará el curso académico 2011-2012, a pesar de su desprecio manifiesto por la educación pública madrileña.
Es falso que tanto los economistas como los responsables políticos coincidan en que para superar la difícil situación económica sea indispensable reducir el nivel de gasto en Educación, puesto que de esto y no de otra cosa se trata.
Es falso que el horario del profesorado de E. secundaria sea de 18 ó 20 horas semanales. Este horario, como el del resto de los funcionarios públicos, es de 37,5 horas semanales distribuidas entre diferentes conceptos: horas lectivas (atención directa en clase), complementarias (guardias, reuniones, atención a alumnos y familiares, etc) y de trabajo en diferentes contextos (corrección de pruebas, redacción de documentación, preparación de actividades, etc). El supuesto aumento del horario de trabajo se corresponde en realidad con una redistribución que, inevitablemente supondrá menor atención a los alumnos y sus familias, menor atención a las guardias y vigilancia o menos tiempo para la preparación de las tareas educativas. Porque, dado que Vd. no se pasa por los centros nada más que para inaugurar, no habrá visto a todos los profesores salir todos los días con carteras, grandes bolsos o mochilas en los que evidentemente se llevan trabajo a casa.
Es cierto que basta con mirar alrededor para ver los cierres de comercios o a los ciudadanos en paro. Vd. contribuye también a esta situación enviando a más de 3000 profesores a las listas del desempleo. Si a estos se añaden los que ya envió en el pasado curso, la cifra se acerca a 5000 los que engrosan, como Vd. dice, las citadas listas.
Es falso que el supuesto ahorro de 80 millones de euros vaya a otras partidas esenciales. ¿Se refiere a educación o sanidad? Es evidente el sentido que Vd. tiene del servicio público pasa por la privatización, puesto que no cree en nosotros, los auténticos servidores públicos que tratamos con ciudadanos y no con clientes. ¿Irán estas partidas a inauguraciones o a la publicidad de “la suma de todos” (incluida Telemadrid) o a empresas privadas que gestionen la educación y cuyo lógico y principal interés sea la obtención de beneficios? En cualquier caso no hace falta que nos aumente el sueldo. Renunciamos al incremento de retribuciones si con esta cantidad vuelve a contratar a los profesores que realmente se necesitan. Sé que Vd. no lo entenderá desde su ultraliberalismo, pero no se trata de dinero. Necesitamos tiempo y recursos para atender debidamente a nuestros alumnos.
Es falsa su convicción de que “la manera más eficaz de combatir esta crisis económica y de prevenir las futuras es mejorar el nivel de nuestra educación”, puesto que en educación está haciendo este recorte económico.
Su equipo de gobierno es el que está dando la verdadera intención del recorte. Baste como ejemplo las declaraciones del responsable de Transportes, Antonio Beteta que dice lo que Vd. realmente piensa: que se trata de acabar con privilegios. ¿Y nos llama a compartir la responsabilidad? Vd. será la principal responsable del deterioro de la educación pública madrileña, nosotros no. Y no dude de nuestro sentido del deber, que es cualidad de quien Vd. tanto desprecia, del funcionario público.
Carlos Pulido Bordallo (Profesor I.E.S. Celestino Mutis)
